Cierre de año del mercado de trabajo. La ocupación puso punto y final a 2024 con 21.857.900 de trabajadores, nuevo récord histórico que tuvo un impulso final en los 34.800 empleos creados entre octubre y diciembre y que llevan el cómputo total de 12 meses hasta los 468.100 puestos de trabajo. El desempleo, por su parte, se situó en 2.595.500, mínimos desde el segundo trimestre de 2008 tras bajar en 158.600 personas en los últimos tres meses, lo que reduce la tasa de paro al 10,61%, su primer registro por debajo del 11% de lo últimos 16 años.
Los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) que publica este martes el Instituto Nacional de Estadística (INE) culminan la fotografía del empleo del año pasado, el cuarto consecutivo en creación de empleo y caída del paro que se traducen en la tasa de ocupación más alta de la historia (67,5%) y que reducen la de paro en 1,2 puntos en el año hasta niveles no vistos desde mediados de 2008.
El contexto a esta situación lo da el crecimiento de la población activa, que el año pasado se incrementó en 202.800 personas (que dejaron la inactividad), elevando el total de personas activas en los 24,45 millones.
Sin embargo, la panorámica de crecimiento no evita la lectura de cierta ralentización si se compara con el año anterior. En el último trimestre del año -el del Black Friday y la época navideña- se contabilizaron menos de 35.000 nuevos trabajadores frente a los 138.000 del tercer trimestre -el de los refuerzos para el verano-. La comparativa anual también sale a deber: en 2023 la ocupación aumentó en 783.000 personas y el pasado no llegó a las 470.000.
El desempeño del desempleo fue mejor que el de la ocupación en la comparativa con las últimas estadísticas. Las casi 160.00 personas que dejaron atrás la situación de paro entre octubre y diciembre (la mayor caída para ese periodo desde que en 2002 comenzara la serie histórica, exceptuando la pandemia) se sitúan muy por encima de las 1.200 del trimestre anterior. En todo el año, la estadística disminuyó en 265.300 desempleados -frente a los 193.400 de 2023 y de los 79.900 de 2022- para caer por debajo de los 2,6 millones.
Con todo, el descenso del paro ha sido inferior al de 2021, cuando en plena vuelta la normalidad tras la pandemia salieron del desempleo 600.000 personas mientras que la evolución de la ocupación de 2024 fue mejor que la de 2022, cuando se generaron 278.900 puestos de trabajo. De ahí que desde Economía destaquen que en el último trimestre del año «se acelera la creación de empleo y la reducción del desempleo».
Grosso modo, la mayor parte del empleo creado en 2024 lo generó el sector privado, con 453.500 nuevos ocupados (el 97% del total). Por sectores, el mayor crecimiento se dio en Servicios, con 424.600 ocupados más (+2,6%), hasta la cifra récord de 16.721.500 ocupados. También aumentó el empleo en industria (55.300 o un 1,9% más) y en construcción (44.800 o +3,1%), mientras se redujo en agricultura en 56.600 trabajadores (-7,1%).
Desde el flanco del paro, hay dos sectores que destacan en 2024 por su incremento en el número de desempleados: construcción, con 1.200 parados más (+1,2%), y la industria, con 700 más (+0,5%). Al otro extremo, la caída del desempleo es especialmente notoria en servicios, con 100.000 desempleados menos, mientras que en agricultura apenas se redujo en 1.900 personas.
En el resto de sectores se registraron descensos. Servicios recortó su volumen de desempleados en 100.000 personas a lo largo del año pasado (-8,9%), mientras que la agricultura cerró 2024 con 1.900 parados menos (-1,5%). En el colectivo de parados de larga duración, el desempleo se redujo en 109.100 personas (-10%), y en el de los que buscar su primer empleo, la mayoría jóvenes, cayó en 56.200 personas (-18,3%).
Más de la mitad de estos nuevos puestos de trabajo fueron a tiempo completo, con un incremento de 290.700 personas, frente a 177.400 nuevos empleos a tiempo parcial. En este sentido, destaca la caída de más de un punto de la tasa de temporalidad hasta el 15,48% como consecuencia del aumento de los asalariados con contrato indefinido en casi 589.400 (+3,9%) y la reducción de los temporales en 133.900 (-4,4%). El dato no es óbice para que los ocupados a tiempo parcial superaran los tres millones por primera vez en la serie, elevando la tasa de parcialidad hasta el 16,7%.
En cuanto a las horas efectivas trabajadas a la semana, los datos del INE reflejan además que la media subió un 1,6% interanual en el cuarto trimestre, hasta las 32,3 horas, frente a las 31,8 horas de un año atrás. En total, el número de horas efectivas trabajadas por todos los ocupados a la semana aumentó un 4,1% interanual en la recta final del año pasado hasta un total de 683,25 millones de horas frente a las 656,64 millones de 2023.
Más de 10 millones de ocupadas por primera vez
Entre los datos destacados que deja la EPA en cuanto a la caída del paro se encuentra la reducción del paro entre las mujeres, que a cierre de 2024 se traducía en 167.100 desempleadas menos (-10,9%); en el caso de los hombres, el retroceso del paro fue de 98.300 personas (-7,4%). Así, la tasa de paro de las mujeres cae al 11,83%, su menor cota desde 2007 y la de los hombres se sitúa en el 9,53%, bajando del 10% por primera vez desde 2008. Pese a la mejor evolución entre ellas, el número de paradas se quedó en 1.362.600, por encima de 1.232.900 de parados hombres.
La brecha de género también se deja ver en la ocupación, aunque la última EPA del año arroja un dato histórico: el empleo femenino marcó nuevo máximo histórico, superando por primera vez los 10 millones de ocupadas, al situarse en 10.151.200 a cierre de año. Con todo, el incremento de la ocupación en 2024 fue, en términos absolutos, superior entre los varones, con 260.700 ocupados más (+2,3%), frente a la creación de 207.400 empleos entre las mujeres (+2,1%).
La tasa de paro juvenil también deja un titular: terminó el año en el 24,9%, su menor nivel desde el tercer trimestre de 2008 (24,2%) y 3,6 puntos por debajo de la de 2023. Así, el número de jóvenes menores de 25 años en paro bajó en 46.600 personas el año pasado, lo que supone un 9,7% menos que en 2023 hasta un total de 434.400.
La reducción del desempleo también se explica en la caída de 109.100 parados de larga duración (más de un año buscando trabajo) y de quienes buscan un primer empleo (-56.200). De los 2,59 millones de parados contabilizados en España al finalizar el año pasado, el 16,7% son jóvenes menores de 25 años y el 37,6% son parados de larga duración (más de un año en el desempleo).
El escenario lo completan los hogares con todos sus miembros en paro, que bajaron en 2024 en 94.700 (-10,2%) hasta los 833.500 hogares, su menor cifra desde finales de 2008. En el polo opuesto, las familias con todos sus integrantes ocupados aumentaron en 249.900 (+2,1%), hasta un total de 11.903.400 hogares, nuevo máximo histórico.