El Atlético de Madrid no pudo recomponerse de su última decepción europea y cayó ante el Betis (1-0) en el Benito Villamarín. Un gol en propia puerta de José María Giménez fue suficiente para que el combinado andaluz se llevase los tres puntos en un encuentro en el que Simeone perdió la batalla táctica ante un Pellegrini que logró una gran cantidad de recuperaciones y no dejó combinar al equipo rojiblanco.
El Betis no tardó una sola jugada en comenzar a aplicar el plan de partido de su entrenador. Los verdiblancos buscaron la posesión del balón y las progresiones por las bandas, especialmente la izquierda, donde Abde fue un dolor de cabeza para la zaga rojiblanca.
Antes incluso de llegar al quinto minuto, los locales se adelantaron en el marcador. El Betis armó una jugada peligrosa por la banda izquierda gracias a un envío profundo de la zaga andaluza. Abde se agenció el esférico y cargó con potencia contra la portería rival, buscando el pase a Vitor Roque. El balón rebotó en Witsel, lo que afectó a la trayectoria y el eventual intento de corte de Giménez, que acabó por enviar el balón al interior de su propia portería.
Los de Simeone se vinieron abajo, incapaces de generar fútbol relevante en el centro del campo ante las recuperaciones casi inmediatas de los andaluces. Johnny Cardoso filtró un pase milimétrico a la espalda de Witsel. Se quedó Abde en el mano a mano con Oblak, pero el marroquí tiró fuera el balón. Lo siguió intentando el ex del Barça, primero con un disparo de larga distancia, y después con un trallazo al travesaño en la siguiente jugada. Rugía el Villamarín y temblaba el Atlético de Madrid.
Más allá de un cabezazo de Reinildo, poco ofreció el conjunto madrileño en la primera parte, que finalizó con varias ocasiones que Vitor Roque y Chimy Ávila no lograron concretar. Tras el descanso y los cambios de Simeone mejoraron los rojiblancos, que rozaron el empate con un disparo a bocajarro de Griezmann y un cañonazo de Julián Álvarez.
Una vez más, el partido del Atleti estuvo marcado por la polémica. Pablo Fornals estrelló el balón contra el travesaño, y se lanzó de cabeza a rematar el rebote. Javi Galán metió la pierna, en acción de juego peligroso, y el colegiado señaló la pena máxima, pero el VAR hizo cambiar de parecer a Gil Manzano, que rectificó su decisión dado que el lateral rojiblanco tocó el balón antes que la testa de Fornals.
Simeone confió en el habitual ímpetu rojiblanco, pero en esta ocasión no fue suficiente. Ángel Correa se encontró dos veces con el poste, certificando la derrota del Atlético de Madrid, que ha caído en tres de sus últimos cinco encuentros disputados, y registra tan solo una victoria en sus últimas seis citas.
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